Qué es
Las personas con diabetes tipo 1 o tipo 2 pueden padecer una enfermedad ocular llamada retinopatía diabética. Esta enfermedad ocurre en pacientes diabéticos de mucho tiempo de evolución con controles metabólicos habitualmente inadecuados y la misma lleva a que se produzcan cambios en los vasos sanguíneos en la retina. Estos vasos sanguíneos pueden hincharse, tener fugas de líquido o inclusive taparse completamente. En casos más avanzados, se produce una proliferación de vasos sanguíneos anómalos que originan hemorragias.
Internacionalmente se clasifica a la Retinopatía Diabética (RD) en 6 grados (Global DiabeticRetinopathy Project Group – GDRPG) desde el grado 1 con aquellos pacientes sin RD aparente, hasta el grado 6: la RD proliferativa que es la responsable de los déficit visuales más severos, ya que sin tratamiento puede conducir a hemorragias vítreas, desprendimiento de retina o glaucoma neovascular.
En cualquiera de estos estadios puede aparecer el edema macular diabético como complicación asociada, siendo este Edema Macular Diabético (EMD) la causa más frecuente de disminución de la agudeza visual en estos pacientes.
Síntomas
Se puede tener retinopatía diabética y no saberlo. Esto se debe a que generalmente no presenta síntomas en sus etapas tempranas. A medida que empeora, se notarán síntomas que suelen afectar a ambos ojos como los siguientes:
- Visión borrosa
- Visión fluctuante
- Visión nocturna deficiente
- Notar que los colores se ven atenuados o apagados
- Disminución visual progresiva
Tratamiento
Su tratamiento será acorde al estadio de retinopatía diabética que el oftalmólogo diagnostique al momento de la consulta. Estas son algunas de las opciones de tratamiento:
- Control médico
En todos los estadios de la retinopatía diabética es primordial el adecuado control endocrinológico por lo que insistiremos fundamentalmente en el control de:
- Glucemia
- Hemoglobina glicosilada (HbA1c)
- Micro albuminuria
- Otras patologías asociadas relacionadas con su estado cardiovascular como la hipertensión arterial, sobrepeso, lípidos, y función renal.
Remitiremos al paciente al endocrino / internista / nefrólogo siempre que sea necesario dada la gran influencia de estos factores de riesgo. Asimismo, se recomendará al paciente dejar de fumar.
Desde el punto de vista oftalmológico, la prevención de la ceguera por retinopatía diabética se basa en la realización de revisiones periódicas del fondo del ojo de manera que los estadios con gran riesgo de pérdida visual puedan ser diagnosticados precozmente y tratados a tiempo.
Si existe un desarreglo metabólico importante nuestro control ocular deberá ser más estricto.
- Medicamentos intravítreos
Este procedimiento de terapia intraocular consiste en administrar fármacos dentro del ojo, los cuales se liberan en la cavidad vítrea. De este modo, la medicación actúa localmente sobre la retina y, en concreto, la mácula (zona central responsable de la visión de detalle).
Los fármacos utilizados, generalmente, pueden ser:
- Antiangiogénicos (anti-VEGF): evitan la proliferación de vasos sanguíneos anómalos
- Corticoides: reducen la inflamación ocular
Inyectarlos directamente en el interior del globo ocular permite aportar altas concentraciones de medicación y evitar los efectos secundarios que podría tener en algunos casos su administración sistémica.
Su médico oftalmólogo le recomendará cuántas inyecciones necesitará y por cuánto tiempo se deberán colocar.
- Fotocoagulación con láser
El tratamiento láser es fundamental para tratar las complicaciones oculares de la diabetes. La panretinofotocoagulación (PFC) consigue evitar la progresión hacia la ceguera en un porcentaje muy alto de pacientes con riesgo de pérdida visual.
El objetivo del tratamiento consiste en detener la fuga de sangre y líquido en la retina para hacer más lenta la progresión de la enfermedad. La decisión de usar este procedimiento depende del tipo de retinopatía diabética.
Es un procedimiento ambulatorio donde se aplica un láser, se realiza con anestesia local y no produce mayores molestias en los pacientes. En general, requiere de varias aplicaciones para cada ojo. Es muy importante que los pacientes a los que se les ha realizado este tratamiento sigan en control periódico con el oftalmólogo, ya que en algunos casos es necesario repetir aplicaciones de láser o realizar otros procedimientos para controlar la enfermedad.
- Vitrectomía
Si el paciente tiene retinopatía diabética en estado avanzado, su oftalmólogo puede indicarle una cirugía llamada Vitrectomía. La misma se realiza cuando la retina comienza a desarrollar nuevos vasos sanguíneos de tipo anormales y con ella se tratan las complicaciones que estos producen.
Prevención
¿Cómo se puede prevenir la Retinopatía Diabética?
La población diabética debe realizar un control estricto de su glucemia, de la presión arterial y de los lípidos plasmáticos.
Existen otros factores que influyen negativamente en la retinopatía diabética como la obesidad, el tabaquismo o el sedentarismo.
Los pacientes con diagnóstico de diabetes (que ascienden a más de 200 millones en todo el mundo) requieren revisiones periódicas por un oftalmólogo ya que, generalmente, la retinopatía diabética no provoca síntomas en sus estadios iniciales.